"Chiie" o Chile. ¿Un error sólo en la moneda?
Categoría: Pedagogía / Inicio
En: La Nación,CR,13 de febrero, 2010, pág.31A
Pretítulo: "Nombre mal escrito"
Título: "Chile despide funcionarios por error en monedas"
Leo hoy que el gobierno de Chile ha despedido de sus trabajos a dos altos funcionarios de la Casa de Moneda porque en la pieza de cincuenta pesos aparece "Chiie" en vez de "Chile". (En otras palabras, los despistados burócratas se pasearon en el nombre del país. Y en el tazón de leche.)
Hacen bien las autoridades en vigilar que los nombres oficiales estén bien escritos y que los irrespondables o los descuidados a quienes les da lo mismo "Chana que Juana", reciban la sanción pertinente.
Sin embargo, de inmediato revolotean un par de traviesos pensamientos que, con todo el respeto y cariño que siento por el país hermano en donde mi padre vivió veinte años felices, paso a exponer:
1.- Sé que hay una distancia del cielo a la tierra entre los nombres oficiales y los que no lo son, pero, ¿no les parece amigos míos que el descuido ortográfico debe sancionarse aunque se trate de nombres no oficiales, incluso hasta como un entrenamiento y un afinamiento constantes?
1.1.- ¿No les parece que deba existir un Defensor del público lector de imágenes y de palabras y, también, un Defensor del ciudadano que tiene que sortear la agresión de miles de letreros mal diseñados, amontonados unos contra los otros de cualquier manera dentro de una permanente discordancia y, además, con horrores ortográficos, arriba, y con aceras llenas de huecos y desniveles, abajo,de tal modo que en ambos casos, a cualquiera "le sacan la madre"."
2.- Por supuesto, Chile es -verdad de perogrullo- CHILE, no CHIIE. Pero, ¿qué pasará amigos cuando después de dos o tres generaciones, la mayoría ignore el sonido de la "che" (che) y como la "h" que la integra es muda, los propios habitantes de ese país del sur ("delgado, largo y alto") empiecen a autollamarse o a ser llamados: cilenos, cilenas, o silenos, silenas, o quilenos, quilenas, o kilenos, kilenas, etc.?
3.- De la misma manera cómo se detectó el "CHIIE", se debió (aún se puede remediar) no haber aceptado la supresión de la "ch".
3.1.- No conozco la posición de la Academia de Chile o de Cile. Sin embargo,ahora detecto en las direcciones electrónicas que la clave que usan no es la "ch" (che) como tendría que ser, sino una "cl" arbitraria que confirma lo que vengo diciendo.
Notas
Lo que es bueno para el ganso, es bueno para la gansa
En la aceptación de la supresión de la "ch" (che), ¿no habrán pecado también de negligencia las autoridades políticas y académicas de ese país del sur?
Si el director y el acuñador de la Casa de Moneda metieron los escarpines y, por eso, los tomaron de las orejas y los pusieron de patitas en la calle, así, pues, las autoridades políticas y académicas, no sólo metieron los escarpines sino las patotas aceptando presurosos la obsolescencia del sonoro CHILE, y su arbitrario cambio por un opaco y desabrido CILE.
Es recordable el pregón de uno de los cuentos orientales: "Cambio lámparas nuevas por lámparas viejas" ignorando que uno de esos "chunches" vejestorios, cuando se lo trataba de cierta manera positiva, era capaz de convocar a los genios del bien. Y la fortuna.
Curiosidad positiva.- En estos días dolorosos inmediatamente posteriores al terremoto del 27 de febrero del 2010, hemos apreciado por la pantalla de la televisión internacional, a los aviones de la Fuerza Aérea de Chile con sus siglas (FACH) así como suenan, con la "ch" final, y así pronunciadas por los locutores y periodistas del hermano país al que extendemos nuestro abrazo solidario.